15 de noviembre de 2022

SALMO 142 NVI

Masquil de David. Cuando estaba en la cueva. Oración.
A gritos, le pido al Señor ayuda;
a gritos, le pido al Señor compasión.
Ante él expongo mis quejas;
ante él expreso mis angustias.
 
Cuando ya no me queda aliento,
tú me muestras el camino.
Por la senda que transito,
algunos me han tendido una trampa.
Mira a mi derecha, y ve:
nadie me tiende la mano.
No tengo dónde refugiarme;
por mí nadie se preocupa.
 
A ti, Señor, te pido ayuda;
a ti te digo: «Tú eres mi refugio,
mi porción en la tierra de los vivos».
Atiende a mi clamor,
porque me siento muy débil;
líbrame de mis perseguidores,
porque son más fuertes que yo.
Sácame de la prisión,
para que alabe yo tu nombre.
Los justos se reunirán en torno a mí
por la bondad que me has mostrado.